Novedades en literatura traducida
El mundo de la literatura traducida no estaría completo sin un espacio para las editoriales, un actor esencial en el ecosistema del libro cuyo trabajo también queremos visibilizar desde La otra margen. Por este motivo lanzamos nuestra sección Novedades donde nuestra audiencia podrá encontrar los libros más recientes publicados por editoriales que apoyan y reivindican el oficio del traductor literario.
Te invitamos a ojear el indice interactivo a continuación para explorar un abanico variopinto de libros y, si quieres aparecer aquí como traductor o editor, a participar en nuestra convocatoria abierta.
Índice de novedades 2024
- Doble o mis veladas en Rusia Menor de Antoni Pogorelski
- Traducción de Alejandro A. González, Dedalus Editores
- Lo que no cabe en palabra: Poesía escrita por mujeres, Colombia/Brasil, 1964-2016
- Traducción de Ángela Cuartas, Biblioteca Nacional de Colombia
- El alma de las flores de Júlia Lopes de Almeida
- Traducción de Juan Camilo Perdomo Morales, Mo Editores
- El diablo en Riga y otros cuentos de Seguéi Mintslov, Valeri Briúsov & Nikolái Gumiliov
- Traducción de Anastassia Espinel Souares, Poklonka Editores
- Una lectura decolonial de la historia de los haitianos de Jean Casimir
- Traducción de Mercedes Bustamante Svilicic, Ambos Editores
- Las reglas del filósofo Jacobo de Pável Guelman
- Traducción de Alejandro A. González, Poklonka Editores
- Poemas selectos de Friedrich Wolf
- Traducción de Maritza García, Editorial Pluma del Este
Doble o mis veladas en Rusia Menor
Reseña por: Eugenio López Arriazu
Traducción y posfacio de Alejandro A. González
Buenos Aires, Dedalus Editores
Doble, o Mis veladas en Rusia Menor es una joya de la literatura rusa. Publicada en 1828, la antología de relatos que se cuentan Antoni y su sosias, no solo crea la palabra “doble” en ruso, sino que da inicio a un rico ciclo gótico del que participaron autores como Aleksandr Pushkin, Nikolái Gógol y Fiódor Dostoievski.
“—…dado que, como dicen, tenemos ya demasiadas palabras extranjeras, me atrevo a proponer que me llame Doble. ¿Qué dice a eso, honorable amigo mío?
—¡Estoy de acuerdo, señor Doble!”
Los cuatro relatos que componen la obra abarcan temáticas y géneros diversos: una historia de amor y fantasmas durante la quema de Moscú en 1812, un relato de autómatas en clave hoffmaniana, un cuento de brujas con un gato satánico y, por último, la aventura de un hombre-mono en África. A esto hay que sumar los deliciosos diálogos entre Doble y Antoni, donde se brinda una anatomía de la inteligencia humana.
Dedalus Editores tiene ya una larga trayectoria en la publicación de literatura extranjera en traducción, siempre desde sus lenguas originales, donde destacan las literaturas eslavas con autores tales como los rusos Mijaíl Lérmontov, Alexandr Pushkin y Guenadi Aiguí, el búlgaro fundador de la literatura moderna de su país Jristo Bótev o el serbio Vladislav Bajac.
Antoni Pogorelski es el último de la serie. Motivó su elección en primer lugar la calidad de la obra, en segundo el hecho de que no había sido nunca traducido al español, en tercero su importancia dentro de la literatura rusa, tanto por su lugar destacado dentro de los años de producción “gótica” en Rusia, como por ser antecedente de El doble de Dostoievski.
Como editorial dedicada a la traducción, la calidad de la misma es una prioridad de nuestra política. En este caso, la editorial se la encomendó a Alejandro Ariel González. Cedo a continuación la palabra al traductor, quien da cuenta mejor que nadie de la inmensa tarea llevada a cabo:
“La traducción de la lengua literaria rusa del primer tercio del siglo XIX siempre es exigente. Por un lado, es una lengua que aún conserva un léxico y una sintaxis arcaica; por el otro, algunas palabras han cambiado su carga semántica y emocional, su «temperatura», y el traductor no debe dejarse llevar de inmediato por su significado actual. El tratamiento entre los personajes responde a formas de cortesía propias del mundo aristocrático, con fórmulas establecidas y algo pomposas para la usanza contemporánea, pero que deben ser observadas para transmitir la lengua y el ambiente de la época. Doble, o Mis veladas en Rusia Menor incorpora muchos elementos folklóricos y realia de los sectores populares, de sus creencias y supersticiones. Estamos en un momento de la literatura rusa, en un «estado de la lengua», en el que los escritores, siguiendo la corriente romántica, recogen tradiciones y modismos del pueblo y les dan carta de ciudadanía en sus obras. Son todos estos elementos que la traducción debe tener en cuenta y albergar en la lengua propia.”
Por último, quiero destacar la labor crítica que rodea a la obra con el prólogo de mi autoría y el posfacio del traductor. En ellos, quisimos brindar al lector algunas líneas de lectura para una obra carente de bibliografía en español hasta el momento. En ellos, se repone tanto el contexto de la época, su producción gótica, el tratamiento del doble y la aparición del fantástico, así como reflexiones sobre la obra misma.
Lo que no cabe en palabra: Poesía escrita por mujeres, Colombia/Brasil, 1964-2016
Reseña por: Melissa Medina Ramírez
Traducción de Ángela Cuartas
Bogotá, Biblioteca Nacional de Colombia
Esta antología recoge las miradas atentas de más de 35 poetas de Colombia y Brasil: qué sentían, qué pensaban y cómo vivieron diferentes coyunturas sociales y políticas marcadas por diferentes tipos de violencias y duelos, en la segunda mitad del siglo XX y el inicio del siglo XXI. Este proyecto se inscribe en la necesidad de seguir creando espacios que promuevan y diversifiquen la escucha entre los dos países y, especialmente, las voces de las escritoras que viven en estos territorios.
Al explorar los tejidos sociales de Colombia y Brasil, es posible encontrar similitudes en sus historias marcadas por la violencia, la corrupción, el racismo y los interminables intentos de relegar a las mujeres al silencio. Unir los sentires de escritoras de ambos países es crear un diálogo transfronterizo que nos permite acceder a una dimensión más íntima, y al mismo tiempo más política, sobre las herencias y heridas compartidas por ambos lugares. Hay resonancias contextuales y diferencias sensoriales que crean un coro heterogéneo de experiencias entre las autoras que, como la antología en general, son como una piedra de materia vibrante al fondo de un estanque que mueve el agua y que reafirma su existencia en cada onda aunque queramos ignorarla.
El proceso de traducción se alza como uno de los aspectos más importantes (y complejos) de este libro. Ángela Cuartas, traductora y compiladora de la antología, se pregunta: “¿cómo escribir poesía en medio del horror? ¿Cómo traducir el horror, el propio dolor y el dolor de los otros? Al mismo tiempo, ¿cómo no hacerlo?” (p. 30). Traducir es embarcarse en un ir y venir entre ganancias y pérdidas, ausencias y presencias, diferentes tipos de dolor y formas de escribir. No es solo pasar de un idioma a otro, es navegar culturas, dolores, deseos, discursos nacionales e historias; es escarbar la tierra, excavar para encontrar restos de otras vidas que nos ayuden a entender la propia y nos recuerden las historias de las que venimos.
Leer esta antología es como entrar a una cueva de ecos infinitos que impregnan la piel con voces que vienen de todas las direcciones, que susurran o gritan en el oído para abrirnos el cuerpo ante el dolor de las demás. Las poetas piensan con todo su cuerpo. Hacen los poemas de su carne, se desgarran con cariño sobre el papel y abrazan con fuerza su dolor: algunas para asfixiarlo y otras para acariciarlo. Ellas lloran, gritan y cantan a través de la poesía. Dicen con fuerza: siempre hemos estado aquí. Sus trabajos enraízan en lo más profundo de su ser, se expanden y crean un juego de ecos y resonancias entre sus vivencias y pensamientos. Además, encuentran cierta intimidad con lo incompleto y lo indecible, cosas que en el poema tienen la posibilidad de existir en su estado de presencia-ausencia, totalidad y fragmentación. A cada verso rehacen el mundo (su mundo, el mundo de todas) a través de una reflexión profunda y sensible sobre lo que significó para cada una ser mujeres y escritoras en contextos de violencia en Colombia y Brasil, dos países que tienen más en común que una frontera geográfica.
La antología, sin importar cómo se mire, es siempre un juego de espejos y reflejos: las lectoras con las poetas; las poetas con la vida, con Ángela; la vida en los cuerpos de las escritoras; las palabras con la ausencia, los idiomas y los países. Es, en ese sentido, una antología de múltiples caminos y lecturas, siempre dispuesta a arrullar a quienes estén dispuestos a mirar el dolor de frente.
El alma de las flores
Reseña por: Juan Camilo Perdomo Morales
Traducción de Juan Camilo Perdomo Morales
Bogotá, Mo Editores
Júlia Lopes de Almeida (Brasil, 1862-1934) se erige en la historia de las letras brasileñas como una de las figuras más prominentes de la literatura nacional. Su pluma versátil abrazó una gran variedad de géneros, escribió cuento, historias infantiles, novela, crónica, reportajes, incluso poesía en secreto. Su obra es un jardín florido, lleno de estilos literarios, de experiencias y de sueños.
Además de literata, Lopes de Almeida destacó por ser ambientalista, republicana, abolicionista, anticlerical, feminista y defensora de la educación, en palabras de sus allegados, una rebelde.
En una época en la que pocas mujeres lograban ser reconocidas como escritoras, desafió los estándares al vivir de sus letras. Aclamada por figuras literarias como Artur Azevedo, Olavo Bilac o Machado de Assis, gozó de fama y prestigio, siendo reconocida por todos sus colegas masculinos.
Así, su relevancia en el panorama y la formación cultural e intelectual de Brasil se hizo innegable, fue parte de círculos intelectuales y su casa en Santa Teresa fue centro de reunión de políticos, literatos, artistas y de las mentes más creativas y perspicaces de Río de Janeiro.
Desde pequeña, escribió cuentos y poemas, según se dice, apoyada por sus padres, quienes eran liberales; a los diecinueve años se aventuró en el periodismo, la crónica y el ensayo; con veinticuatro, presentó al mundo su primer libro, marcando el inicio de una prolífica carrera literaria que resonaría en la historia cultural de Brasil.
Sus cuentos infantiles son considerados precursores, anticipándose incluso a las obras del afamado Monteiro Lobato, y perduran hasta hoy como lecturas obligatorias en aulas de clases.
Con Historias de nossa terra, Lopes de Almeida desempeñó un papel crucial en la formación de la identidad nacional brasileña, con cautivadoras narrativas infantiles. Propósito que encaró también, a través de la admiración por la selva, los árboles y las flores nacionales.
Pero no solo escribió historias encantadoras, libró a su vez una ferviente batalla por la igualdad social y los derechos de la mujer. Denunció con una fuerza y crudeza sin precedentes la difícil realidad que enfrentaban las mujeres. Se atrevió a retratar la violencia, la desigualdad, el terror y el sometimiento a una sociedad masculina opresiva, cuestiones que muchos otros evitaron.
Su labor como defensora de los derechos de las mujeres la llevó a presidir la Legión de la Mujer Brasileña, y fue reconocida y homenajeada más allá de las fronteras de su país por El Consejo Nacional de Mujeres en Argentina y el Instituto Cultural Femenino en Cuba. También fue defensora de los derechos de la naturaleza y los derechos de las personas negras esclavizadas.
Pese a ser reconocida y apreciada por sus colegas masculinos, y de que su inmenso talento fuera innegable, Júlia Lopes de Almeida se topó con obstáculos insospechados por ser mujer, por ejemplo, aunque formó parte del selecto grupo que fundó la Academia Brasileña de Letras, fue expulsada por ser mujer.
Resulta asombroso, a nuestros ojos, descubrir que Almeida figuró en la lista original de los cuarenta inmortales de la Academia escrita por Lucio de Mendoça, aquel distinguido grupo de escritores e intelectuales claves en su fundación. Incluso, en la lista de académicos, se menciona que ocuparía la cadeira 3, pero tal inclusión fue efímera en su afán de emular la Academia Francesa que era exclusivamente masculina.
Aun así, nadie le quita el mérito de ser la única mujer en figurar en la lista original, aunque, finalmente, fue su esposo, Filinto de Almeida, quien ocupó su silla a pesar de que la crítica concordara en que, en comparación con la obra de su esposa, su trabajo era notablemente inferior.
Poco le importó ser excluida, su popularidad y reconocimiento no dependían de la Academia, sus libros vendían más que los de cualquier otro colega y las editoriales le pedían publicar casi que un libro al año; eso, sin mencionar las muchas conferencias en las que llenaba auditorios.
Su innegable calidad literaria no solo la hizo destacarse como una gran referente dentro de la literatura brasileña, sino que también llevó a múltiples traducciones de sus obras al inglés y al francés, algunas realizadas incluso estando ella viva.
Sin embargo, resulta bastante curioso que su presencia en español sea relativamente escasa y reciente. La primera vez que se tradujo al español la obra de Lopes de Almeida fue en 1946 de la mano de la editorial Espasa Calpe, como parte de su Primera antología de cuentos brasileños con el cuento La tuerta.
Desde entonces, la presencia de su obra en países de habla hispana ha sido escasa. En 2014, la editorial argentina Leviatán publicó Ellas y ellos con la traducción de Amalia Sato, pero fue solo hasta dos años después que su obra volvió a captar atención en español con la publicación de La familia Medeiros y La intrusa por la editorial española Libros de Seda, traducidos por Noelia Rodríguez y Noemi Jimenes, respectivamente. En 2023, el Fondo de Cultura Económica lanzó en su reconocida colección Voces del Pueblo el título La tuerta y otros relatos, traducido por Paula Abramos.
Además de estas contadas ediciones, algunos de sus cuentos han sido traducidos para revistas y congresos especializados, por ejemplo, Esperando, traducido por Roxana Guadalupe Herrera, Arte culinario, por Julia Knop y Ana Martín Garrido, y O flores, por Ismarie Díaz Flores y Lucía Rodríguez.
Pese a esto, creemos que falta mucho por conocerla y gracias a la complicidad con Mo Ediciones tomamos la batuta y nos animamos a presentarles un compendio de textos, sobre feminidad y naturaleza, a modo de invitación para explorar su vasta y maravillosa obra.
El diablo en Riga y otros cuentos
Reseña por: Poklonka Editores
Traducción de Anastassia Espinel Souares
Bogotá, Poklonka Editores
Los tres autores, cuyos relatos están incluidos en esta colección, pertenecen a un período de la historia literaria rusa, conocido como Siglo de Plata, nombre puesto por analogía con el Siglo de Oro, perpetuado en la cultura universal gracias a Aleksandr Pushkin, Lev Tolstói, Fiódor Dostoievski y muchos otros escritores que de tiempo atrás se conocen en el mundo hispanohablante. La editorial Poklonka tiene el gusto de ofrecer a los lectores una recopilación de obras traducidas al español por primera vez: los cuentos de suspenso y misterio de tres poetas y prosistas de finales del siglo XIX – principios del siglo XX, que permiten apreciar una de tantas facetas que destacan la narrativa rusa de aquellos y otros tiempos.
Seguéi Mintslov (1870 – 1933), Valeri Briúsov (1873 – 1924) y Nikolái Gumiliov (1886 – 1921), los tres vivieron en la época del gran remezón en la vida política de su país que los afectó de formas distintas: uno emigró y se quedó en el exterior hasta su muerte, el segundo aceptó la Revolución y murió de neumonía en los albores de una nueva realidad y el tercero fue fusilado por los bolcheviques por una falsa acusación.
Formaron parte de diversas corrientes poéticas modernistas; sin embargo, los tres compartían en la prosa el interés por lo misterioso, mítico, inescrutable, y este libro es una muestra representativa de cómo trató el tema cada uno de ellos: Mintslov, siendo arqueólogo, cuenta sus historias como parte de sus experiencias en las indagaciones científicas y leyendas urbanas recopiladas; Briúsov explora la psique humana y las crueles jugadas que hace a veces; Gumiliov recoge sus vivencias de las dos expediciones al este y nordeste de África para poblar la imaginación de espeluznantes criaturas.
La traductora de los relatos, Anastassia Espinel Souares, desde 1998 reside en Colombia; es historiadora, profesora universitaria y escritora, autora de varios libros publicados en Colombia y España que se basan principalmente en aventuras históricas para jóvenes. Para nuestra editorial, que en muchos casos se propone descubrir nombres nuevos a pesar del riesgo que entraña esta labor, fue de gran satisfacción recibir su propuesta de traducción.
Una lectura decolonial de la historia de los Haitianos
Reseña por Mercedes Bustamante y Jean Casimir
Traducción de Mercedes Bustamante Svilicic
Isla Negra, Ambos Editores.
Fiel a la línea editorial de AMBOSeditores que consististe en difundir las voces y letras haitianas en las distintas comunidades hispano hablantes, decidimos traducir esta obra motivados muy especialmente por las palabras introductorias del autor a los potenciales lectores, explicando a quién va dirigido su obra:
“Este estudio está destinado a los que desean escuchar al pueblo haitiano para entender lo que está diciendo, esa palabra que dificultosamente podemos adivinar porque el mundo moderno la mantiene prisionera en la cultura dominante y en su escritura del pasado para hacer creer que no existe.
El pueblo haitiano no pierde su voz, aunque exprese su voluntad de vivir aislado. La modernidad occidental, el mundo que habla en voz alta y escribe con autoridad, tiene sus propios fines y no tiene por qué escuchar a los haitianos. El investigador que desea hacerlo debe enfrentarse a un aluvión de historias construidas sobre conceptos que derivan, según esta modernidad, de su presunto derecho de conquista. Su cruz y su espada la autorizan a ser sorda y ciega en sus relaciones con los contemporáneos que declara haber vencido, pero que debe seguir venciendo día a día. Tapándose los oídos y cerrando los ojos, se complace con la ilusión de mantenerlos prisioneros en el pasado.
Este estudio es interferido por los ruidos de la modernidad, y mi dominio insuficiente del pensamiento y los sentimientos de este medio que me moldea no me ayudan a evitar estas interferencias.
Los sufrimientos, la rabia, la sangre, así como lo vivido de un exterminio sin piedad son el lenguaje de los sobrevivientes de la esclavitud.
Recién empiezo a aprender las lecciones de aquellos que me han dado la vida. Trato de hacerlo consultando los archivos que documentan su esclavitud. Mi estudio permanece a priori inacabado, porque este pensamiento de donde emerjo y que me inventa, solo me sirve de trasfondo”.
Las reglas del filósofo Jacobo
Reseña por: Poklonka Editores
Traducción de Alejandro A. González
Bogotá, Poklonka Editores
Hay libros que se resisten a ser clasificados por su género y contenido, lenguaje y propósito del autor. En efecto, ¿cómo se llamaría una colección de anécdotas copiosamente ilustradas, aparentemente sin ninguna relación entre sí -en cada página, una anécdota nueva-, que nacieron en Facebook tras un año de profundas reflexiones sobre la vida, el destino y cosas por el estilo, con el infaltable toque humorístico que llega a adquirir a veces unos matices sarcásticos?
Así es el libro “Las reglas del filósofo Jacobo” que en 2018 publicó la editorial rusa “Novoe literaturnoe obozrenie NLO” (Nueva Revista Literaria) y en 2022 lanzó en español Poklonka Editores, traducción de Alejandro Ariel González quien esta vez brilló por su gran habilidad de encontrar equivalentes muy acertados para transmitir el humor del texto original, que es lo más difícil en el arte de la traducción literaria.
Su autor es Pável Guelman, guionista, dramaturgo y escritor que hasta ahora ha producido más de 30 proyectos de filmografía. Un buen día se inventó un ambicioso sabio al margen de la sociedad quien constantemente resulta involucrado en situaciones absurdas pero graciosas. Gracias a las insólitas sentencias, en algo parecidas a las parábolas zen o el judaísmo jasídico, se hizo famoso entre los seguidores de su página, lo cual motivó a su “progenitor” a reunirlas en un libro ilustrado por el maestro Konstantín Batynkov. He aquí dos de las “perlas” de Jacobo que esperamos les parezcan interesantes:
Al filósofo Jacobo le pidieron que hiciera un pronóstico. «Cuando los hombres esperan el apocalipsis —dijo Jacobo—, eso habla no de su sensata valoración de la realidad, sino de la valoración de su camino vital. Quienes esperan el apocalipsis consideran en el fondo de su alma que no merecen nada mejor y exigen un final justo».
Al filósofo Jacobo le preguntaron qué opinaba de las artes marciales. «Es un elemento que me resulta ajeno —dijo Jacobo—. Requieren que en cada momento de la vida nuestros cerebros estén despejados, precisos y concentrados al máximo. Y yo adoro la basura en la cabeza. Si no la hubiera, ¿cómo sabría qué estoy pensando en realidad?».
La fuerza narrativa en la poética de Friedrich Wolf
Reseña por: Peer Lewanow
Traducción de Maritza García
Bogotá, Editorial Pluma del Este.
Es un honor presentar por primera vez al público hispanohablante la poesía de Friedrich Wolf, un autor cuya influencia y relevancia se extienden más allá de los límites del teatro y la literatura alemana del siglo XX. Conocido principalmente por su trabajo en el teatro durante los años veinte en la República de Weimar, Wolf ha dejado una marca indeleble en la cultura europea que merece ser explorada en toda su profundidad.
Friedrich Wolf no solo fue un destacado dramaturgo, sino también un poeta cuyas obras reflejan la agitación y la esperanza de su tiempo. Con el volumen de poesía que acabamos de publicar y que contiene, entre otras, piezas de carácter teatral como «¿Qué hicimos?» o «Arte es arma», que revelan su habilidad para fusionar el verso con una poderosa narrativa dramática, ofrecemos al público hispanohablante una recopilación de algunos de sus poemas más destacados. Esta traducción al castellano desde la variante colombiana, a cargo de Maritza Adriana García Arias, recrea con audacia la forma y el fondo de los versos del poeta alemán; su propuesta de traducción brinda la oportunidad de apreciar tanto los recursos poéticos del autor, la complejidad y el compromiso político de Wolf, así como su visión crítica de la sociedad.
La importancia de Friedrich Wolf en la República de Weimar y, posteriormente, en la República Democrática Alemana (RDA) no puede subestimarse. Su obra fue un faro de resistencia y reflexión en tiempos de turbulencia, y su impacto cultural sigue siendo relevante hoy en día. Al traducir su poesía al español, buscamos no solo dar a conocer su voz innovadora, sino también fomentar un diálogo intercultural que enriquezca nuestra comprensión de la literatura europea y sus contextos históricos. Este esfuerzo de traducción es un primer paso para acercar a los lectores de habla hispana a la riqueza de la obra de Friedrich Wolf, ofreciéndoles una ventana a la compleja y vibrante realidad de su tiempo y legado.